La pelota vasca, uno de los últimos resquicios de los antiguos juegos europeos de pelota, sigue atrayendo la atención de los franceses. En París a finales siglo XVII y antes de la Revolución francesa, había mas de 120 peloteros que cosían sin parar pelotas de jeau de paume, de xistera, de xare, pala, y otras modalidades que se jugaban en trinquetes, paredes, frontones y calles. Nuestros estudiantes de París, además de conocer nuestro deporte, han aprendido sobre la historia de su ciudad.